Los científicos siguen rompiéndose la cabeza a cerca del origen y la evolución del Hombre y de la vida en nuestro planeta. Así, los investigadores rusos del Instituto de Ecología y Evolución de la Academia de Ciencias de Rusia expusieron sus versiones que ponen en duda la teoría de Charles Darwin, indicando que tanto los Homo Sapiens como los monos no tienen antepasados en la Tierra.
…
Ramas independientes
En su informe Belov expone otra teoría, según la cual los monos y los Homo Sapiens son ramas biológicas independientes que no se vinculan entre sí. Esta conclusión se debe a un detallado estudio de múltiples muestras fósiles de mandíbulas, dientes, cráneos y otros huesos, llevado a cabo durante muchos años por un grupo de arqueólogos.
Tyunyáev, por su parte, también llega a la misma conclusión de que a lo largo de los años en el marco de la evolución humana, el Homo Sapiens no hacía más que degradarse.
Entonces… ¿quiénes somos?
Sean cuales fueran los orígenes del Homo Sapiens, los investigadores están de acuerdo: todavía no se han encontrado a los antepasados biológicos de los seres humanos y de los monos en el planeta que confirmen la teoría de la evolución de Charles Darwin.
Artículo completo en:http://actualidad.rt.com/ciencia_y_tecnica/inventos/issue_37887.html
Nota dezpierta: Me resulta muy interesante que estos investigadores digan que el Homo Sapiens no hacía más que degradarse.
Si leemos con atención la Biblia, veremos que la esperanza de vida del ser humano sufrió un vertiginoso descenso. Desde los 969 años de Matusalén hasta los 100 máximo que cumplen nuestros ancianos en unas condiciones de salud física y mental lamentables en la mayoría de los casos, si llegan.
No podemos negar que esta teoría de involución, más que de evolución que presentan estos científicos rusos, está mucho más en consonancia con la historia biblica que cualquier otra haciendo referencia al origen de la humanidad.
Me parece sumamente importante esta afirmación: «Sean cuales fueran los orígenes del Homo Sapiens, los investigadores están de acuerdo: todavía no se han encontrado a los antepasados biológicos de los seres humanos y de los monos en el planeta que confirmen la teoría de la evolución de Charles Darwin».
Pero como esto no conviene a la ciencia, poco caso harán a estos investigadores.
Que Dios os bendiga.