Berlín, 8 oct (EFE).- La canciller alemana, Angela Merkel, manifestó hoy en Bonn su satisfacción por la puesta en marcha del fondo permanente de rescate, el denominado Mecanismo Europeo de Estabilidad (MEDE), cuyo consejo de gobierno celebró hoy su sesión constitutiva en Luxemburgo.
En el marco de una conferencia interna de líderes cristianodemócratas a nivel estatal, regional y europeo, la canciller afirmó que el MEDE es la combinación perfecta de condiciones para una política presupuestaria sólida y para la solidaridad.
Previamente, el portavoz del Ejecutivo alemán, Steffen Seibert, destacó en un encuentro rutinario con medios de comunicación que el gabinete de centro-derecha encabezado por Merkel ve positivamente el arranque de este instrumento que, a su juicio, combina solidaridad y condicionalidad.
«Se trata de solidaridad y estabilidad para superar la crisis. Es un buen día para Europa«, resumió Seibert, que recalcó que cualquier intervención del MEDE implica «estrictas condiciones».
El portavoz del Ejecutivo alemán recordó que este fondo de rescate es un mecanismo pensado para el largo plazo, en el que Europa lleva dos años trabajando y que cuenta con un abanico de posibilidades de actuación para atajar la crisis.
Su objetivo es tanto ayudar financieramente a países miembros de la eurozona frente a problemas coyunturales como ejercer de cortafuegos para evitar posibles contagios entre naciones a causa de la incertidumbre y no de los fundamentales.
El MEDE se constituyó hoy formalmente con la primera reunión de su consejo de Gobierno en Luxemburgo, de forma paralela a la celebración de los encuentros del Eurogrupo y el Ecofin.
El fondo permanente de rescate arranca ahora, cuando estaba previsto que empezase a funcionar el pasado julio, ya que una serie de recursos ante el Tribunal Constitucional alemán bloqueó su puesta en marcha.
El pasado 12 de septiembre, el Tribunal Constitucional falló a favor de la contribución alemana al MEDE, aunque señaló unas mínimas condiciones.
Fuente: yahoo.com
Nota dezpierta: Los pasos hacia la unificación de Europa se están dando con seguridad y rapidez. Este mecanismo de estabilidad tiene por objetivo garantizar el equilibrio de la Unión, porque como dice la profecía de Daniel, se unirán como se une el hierro y el barro.
«Y lo que viste de los pies y los dedos, en parte de barro cocido de alfarero y en parte de hierro, será un reino dividido; mas habrá en él algo de la fuerza del hierro, así como viste hierro mezclado con barro cocido. Y por ser los dedos de los pies en parte de hierro y en parte de barro cocido, el reino será en parte fuerte, y en parte frágil. Así como viste el hierro mezclado con barro, se mezclarán por medio de alianzas humanas; pero no se unirán el uno con el otro, como el hierro no se mezcla con el barro«. (Daniel 2: 41-43)
Se mezclarán pero no será una mezcla homogénea. A pesar de ello, Europa, según mi opinión, como laboratorio del Nuevo Orden Mundial, debe resultar en un experimento exitoso que será exportado al resto del mundo como la solución perfecta para los problemas que acucian hoy a todos los países.
¿Cual es la clave del éxito?, ¿austeridad? Claro, austeridad para el pueblo, menos derechos para los pobres que terminarán acostumbrándose y consumirán de nuevo cuando piensen que las cosas no van a ir a peor.
Con ciudadanos con menos derechos y garantías, se garantiza el enriquecimiento de los gobiernos dirigidos por la clase alta, que ganará todo lo que habrán perdido las clases media y baja.
La Bestia está recuperando el poder que perdió tras la revolución francesa y la revolución industrial. Una Nueva Edad Media se cierne sobre una Europa que se dirige hacia la recuperación de los valores que la vieron nacer, el catolicismo romano dirigido por la doctrina moral del Vaticano.
Queda poco tiempo. Pero me gustaría terminar con la última parte de la profecía de la estatua del sueño de Nabucodonosor:
«Y en los días de estos reyes el Dios del cielo levantará un reino que no será jamás destruido, ni será el reino dejado a otro pueblo; desmenuzará y consumirá a todos estos reinos, pero él permanecerá para siempre»… (Daniel 2:44)
Que Dios os bendiga.