El salmón del Báltico prohibido en la UE por su peligrosidad alimentaria

salmon.jpg

En 2002 la Unión Europea prohibió la comercialización de salmón del Báltico en todos los países miembros, excepto en Suecia, Finlandia y Lituania, donde está permitido el consumo, pero no la exportación.

El salmón bañado en estas aguas tiene unas altas concentraciones de dioxinas, compuestos químicos –principalmente, subproductos contaminantes de procesos industriales– que hacen peligroso su consumo. Según la Organización Mundial de la Salud, cuando las dioxinas se consumen en grandes cantidades, pueden causar daños al sistema inmunológico, lesiones en la piel, daños al hígado e, incluso, cáncer. Y en el salmón del Báltico las concentraciones son tres veces mayores que en el pescado de otros orígenes. Sigue leyendo